Por Magistrada Gloria Ángeles Cruz López 24/10/2025

El Día de las Naciones Unidas, el 24 de octubre, marca el aniversario del día en que entró en vigor la Carta de las Naciones Unidas en 1945. Con la ratificación de este documento fundacional por parte de la mayoría de los Estados firmantes, las Naciones Unidas nacieron oficialmente. México firmó inicialmente, junto con otros 50 país fundadores.

A 80 años de su fundación, es importante reflexionar sobre los resultados obtenidos y el porvenir de la ONU. No existe ninguna otra organización mundial con la legitimidad, el poder de convocatoria y el impacto normativo de las Naciones Unidas. Ninguna otra organización mundial da esperanza a tanta gente para un mundo mejor y puede ofrecer el futuro que queremos.

El concepto de derechos humanos ha evolucionado a partir del establecimiento de este órgano deliberativo. La justicia internacional para materializar los derechos fundamentales ha sido posible a través de su trabajo institucional. Hoy por hoy, abordar los derechos humanos de las mujeres, de los pueblos originarios, de las infancias, de la asistencia a personas refugiadas, del desarme nuclear y la neutralización de las amenazas armamentistas, entre muchísimos otros temas, no sería igual sin los avances y desafíos visualizados gracias al sistema de Naciones Unidas.

El hecho de contar con un sólido cuerpo jurídico de tratados internacionales, cuya base fundamental en la Carta de Naciones Unidas y la Declaración Universal de los Derechos Humanos como norma orientadora, sustentan el derecho internacional de los derechos humanos. Los resultados han sido instrumentos, como la Convención de derechos del niño y la Convención sobre la Eliminación de Todas las formas de discriminación contra la mujer, que han transformado constituciones y mecanismos para materializar la igualdad y la justicia hacia poblaciones en desventaja.

Actualmente, es visible que el mundo que le dio origen a la Organización de Naciones Unidas es distinto. La seguridad y la paz internacional, así como el respeto y protección de los derechos humanos, enfrentan formas distintas en las que se comunican los Estados y la violencia parece no ceder. Sin embargo, el mensaje de la asamblea global ha sido no rendirse y abordar los desafíos con dignidad.

Durante la ultima sesión de la Asamblea General en septiembre de 2025, el cual es el órgano deliberativo más importante del sistema de Naciones Unidas, un número de Estados, incluidos México, se pronunciaron por una reforma para replantear la igualdad jurídica de los países en los órganos de conformación de la organización; principalmente, el Consejo de Seguridad y su capacidad para afrontar los retos actuales para mantener la paz.

En 2026 se renueva la Secretaría General para un mandato de cinco años a cargo de la institución. Después de cumplir dos mandatos desde 2017, concluye su gestión en un momento clave para la organización ante desafíos para la seguridad y la salud global. Para la siguiente gestión, a pesar de no ser una norma escrita sino una buena práctica el equilibrio regional, es innegable el momento y necesidad histórica de contar con una mujer Secretaria General de la institución y, ¿por qué no?… Una mujer de Latinoamérica.

Las Naciones Unidas han contribuido a mejorar la vida de las personas en todo el mundo promoviendo la paz, los derechos humanos y el desarrollo social, en particular la justicia, la sanidad y la educación, con el fin de mejorar la condición de vida de todas las personas. Con 80 años de experiencia, es importante reafirmar los propósitos y principios de la Carta de la ONU.

Todos los derechos, para todas las personas, sin dejar a nadie atrás.

Por Editor